viernes, 29 de mayo de 2020

EN RECUERDO A SANTIAGO CASTELO



Hoy cedo nuevamente esta plataforma a unos amigos que quieren recordar y homenajear la figura de Santiago Castelo, en el quinto aniversario de su muerte.

Para aquellos que no le conocimos personalmente, saber que D. José Miguel Santiago Castelo fue un escritor y periodista extremeño, director de la Real Academia de Extremadura y subdirector del diario ABC, nacido Granja de Torrehermosa (Badajoz) el 11 de septiembre de 1948.

Numerosos premios llevan su nombre, uno de ellos lo otorga el Ayuntamiento de Don Benito.

El Premio Santiago Castelo a la Trayectoria Periodística se constituye en el año 2015 como merecido reconocimiento a la labor profesional e institucional que D. José Miguel Santiago Castelo ha ejercido durante tantos años dentro y fuera de las fronteras de Extremadura.

También editó Vberitas este libro "AIRE POR AIRE" en el que un grupo de amigos, casi todos extremeños, le dedican poemas, cartas, dibujos, fotografías... y que amablemente me dedicó su editor (J.R.M.G.)





Biografía


Tras estudiar periodismo, Santiago Castelo ingresó en ABC, diario del que fue nombrado subdirector en 1988. Además de periodista, ha destacado por su obra literaria, la mayoría libros de poemas. Su primer poemario (Tierra en la carne) apareció en 1976. En 1982 su obra Memorial de ausencias obtuvo el Premio Fastenrath de la Real Academia Española, publicado en 1978.

Del resto de su obra destacan Monólogo de Lisboa, La sierra desvelada, Cruz de Guía, Cuaderno del Verano, Cuerpo cierto, La huella del aire, Quilombo, La hermana muerta, Esta luz sin contorno y la antología Como disponga el olvido.




Además de miembro numerario y director de la Real Academia de Extremadura fue miembro correspondiente de la Academia Norteamericana de la Lengua Española y de la Academia Cubana de la Lengua.

Fue distinguido con la Medalla de Extremadura y recibió el Premio ABC Cultural & Ámbito Cultural, de manos de sus directores Fernando Rodríguez Lafuente y Ramón Pernas. Además le fueron concedidos, entre otros, los premios Hispanidad y Gredos de poesía y los premios Julio Camba y Martín Descalzo de periodismo y fue Hijo Adoptivo de Fontiveros e Hijo Predilecto de Granja de Torrehermosa.


Al fondo, Medellín


Igual que bajo el puente de este río

el agua pasa mansa en su costumbre

de suavizar la vega y darnos aire

con el testigo de esas ralas hierbas

entre las comisuras del granito,

miro el fluir del cielo en la corriente

desnudo y sumergido, así de inmenso,

y todo el gozo de quien fuera niño

ajeno a tanto olvido y tanta historia

bañándose en las aguas del verano

de un Guadiana con limo entre los juncos

se me hace conmoción por un recuerdo:

el día en que comimos, Santiago,

en un mesón de Medellín cercano.

Y unas fotos contigo sonriendo

con el castillo al fondo antes de irnos

con Lucía, con Carlos, con Marina

demuestran el cariño que hubo siempre

aunque en verdad nos viéramos tan poco.

Esa estampa extendida del paisaje

del río en su relieve de silencio

junto a la orilla por la que crecimos,

me interna en lo vivido ya lejano

que vuelve como el día en esa imagen

del curso que nos mece lentamente

o la hondura del cauce donde vernos.

Por Carlos Medrano

(El día 29 de mayo de 2020 será el quinto aniversario de la muerte de Santiago Castelo. En esto, en las ausencias, el tiempo pasa rápido, nos desborda de grande, porque su suma es mayor que la imperceptible distancia de los seres queridos ya idos con nosotros. 



Esta imagen de un vídeo de Medellín por fortuna enviado por Juan Ricardo Montaña me trajo el recuerdo de uno de los últimos felices encuentros en Extremadura con Santiago Castelo, en el verano de 2012, en una grata comida con Lucía Mera, Carlos García Mera, mi hija Marina y quien esto escribe y da fe del rico salmorejo que probó.)



Carlos Medrano vivió en Don Benito hasta los 18 años. Licenciado en Filología Hispánica y en la actualidad es profesor de Instituto en Mallorca. Poeta de reconocido prestigio fue uno de los amigos próximos de Santiago Castelo desde el año 1978, cuando Santiago Castelo fue mantenedor de los Juegos Florales del Colegio Claret, donde cursaba Carlos sus estudios. Aquel año, Carlos ganó los Juegos en dos categorías.




Tiene un blog llamado "isla de lápices", donde publica sus poemas. Poeta de extraordinaria fuerza lírica, analítico y descriptivo retrata los paisajes de la isla con una ensoñación poco usual y delicada belleza.


 Poema objeto dedicado a Carlos Medrano "isla de lápices" J.R.M.G.

Fuentes: 

Juan Ricardo Montaña García.
Wikipedia

martes, 26 de mayo de 2020

DON BENITO. HISTORIAS DEL TREN



En el año 1866, nuestra ciudad vio el fugaz paso de la reina Isabel II por la estación de ferrocarril, el viaje era cortesía de la casa Real Española a los Reyes de Portugal con motivo de la inauguración de la línea de ferrocarril Ciudad Real - Lisboa. 







Con estas nuevas tecnologías, aparte del progreso, en aquella época surgieron nuevos peligros en forma de accidentes, la mayoría de ellos se debieron a fallos humanos como el ocurrido el 21 de diciembre de 1929 cuando una camioneta del servicio público que hacía diariamente el trayecto entre Medellín y Don Benito fue alcanzada por la máquina en un paso a nivel sin vigilancia.




El choque fue tremendo y la camioneta salió despedida a más de 300 metros, quedando destrozada. En el accidente perecieron dos mujeres, madre e hija, y un hombre, que también viajaba en el interior del vehículo. El conductor y propietario de la camioneta, Manuel Peña Bote, sufrió heridas gravísimas, que determinaron su muerte a la media hora de ocurrir el choque. El ayudante, Domingo Habas Hurtado, quedó gravemente herido. Aunque se ignoran las causas del accidente, se cree que obedeció a la negligencia del guardabarrera.



No fue el único accidente, ya el 13 de agosto de 1891 y debido a la posición equivocada de una aguja, había colisionado el tren correo procedente Madrid con una composición de 18 vagones de mercancías que se hallaban aparcados en la estación.



El maquinista pudo aminorar la marcha del convoy al percatarse de que entraba en la vía equivocada, pero no pudo evitar el choque, fracturándose una pierna y un viajero resultó con heridas graves.



Y también numerosas tentativas de suicidio, como la de agosto de 1928, que en el kilómetro 333 de la línea (entre las estaciones de Medellín y Don Benito) se arrojó al paso del tren descendente de Badajoz Rafaela Neira Méndez, resultando con heridas gravísimas.


Foto: ESTACIÓN DE DON BENITO. Agustín Aparicio/Manoli Camacho, optimizada por dovane63


Foto: ESTACIÓN DE DON BENITO. Agustín Aparicio/Manoli Camacho, optimizada por dovane63
Estas fotografías me las ha enviado Agustín Aparicio Cerrato, se las ha proporcionado Manoli Camacho, su padre era viajante de comercio y posiblemente es uno de los que aparecen en estas fotografías tomada en la estación de Don Benito en los años 30 del siglo pasado.

FUENTES Y AGRADECIMIENTOS:
  • El Imparcial de Madrid, domingo 22 de diciembre de 1929
  • El Liberal, sábado 4 de agosto de 1928
  • Accidentes Ferroviarios en España, de Manuel José Marcos Montero (Federación Castellano Manchega de amigos del Ferrocarril)
  • Agustín Aparicio Cerrato.
  • Diego Sánchez Cordero.
  • Portada: Estación de Don Benito a finales del siglo XIX. Foto cedida por Herminio Fernández.