PASEANDO POR GUADALUPE

El Real Monasterio de Santa María de Guadalupe (Cáceres- Spain) se edificó a lo largo de los siglos XIII al XVIII y es una mezcla de estilos gótico, mudéjar, renacentista, barroco y neoclásico. Patrimonio de la Humanidad desde 1993. La Virgen de Guadalupe es la patrona de Extremadura y en 1928 recibió el título de Reina de las Españas o de la Hispanidad.

EL CLAUSTRO

Se llama claustro a la galería con columnas que rodea el patio principal de un monasterio, en este caso el de Guadalupe, es uno de sus elementos más representativos y el único espacio que actualmente se puede fotografiar (ya os podéis imaginar lo que me costó no apretar el disparador). El denominado “claustro mudéjar o de Los Milagros”, fue construido entre los años 1389 y 1405. Consta de dos pisos rodeados de bellos arcos de herradura. En el centro se encuentra el famoso templete, realizado con barro cocido y ladrillo, decorado con azulejos y yeserías, obra de Fray Juan de Sevilla.

En unos de los ángulos del patio podemos ver el “Lavatorium” una fuente en la que se lavaban los monjes sus manos antes de pasar al comedor. En sus galerías se conservan varios sepulcros medievales, entre los que destaca el de fray Gonzalo de Illescas, Obispo de Córdoba y Prior del Monasterio y los 30 grandes cuadros pintados entre 1621 y 1623 por fray Juan de Santa María en los que se representan la historia y los milagros de la Virgen, uno de los cuadros más conocidos es el de la batalla de Salado, una acción librada en el año 1340 entre las fuerzas cristianas de los reyes Alfonso XI de Castilla y Alfonso IV de Portugal en la que fueron derrotados los ejércitos musulmanes del rey de Granada y de los Benimerines, Mariníes o Meriníes, nombre castellanizado de los Banu Marin, la dinastía bereber norteafricana más importante que surgió tras la caída y destrucción del Imperio Almohade.

 LA FUENTE DE LOS TRES CHORROS

Atravesando la puerta o arco llamado de Sevilla, nos encontramos con otro de los mágicos rincones con los que cuenta la Puebla de Guadalupe, es una placita rodeada de casas de dos plantas con los típicos balcones de vigas de madera de castaño, en el centro de ella, hay una fuente, denominada de los tres chorros que data del siglo XV y que según un códice medieval estuvo conectada una importante red hidráulica de la Edad Media. El tenue susurro del agua y la calma que reina en este lugar hacen que tu alma se sienta plácidamente invadida por un gran sentimiento de paz y serenidad.

LA FUENTE DE LA PLAZA

Esta icónica fuente de la Plaza de Guadalupe, miles de veces fotografiada, acoge en su centro una pila caliciforme extremadamente sencilla, de granito, que recoge una semiesfera gallonada o de gajos de la que salen cuatro caños de agua, esta pila se alza sobre una pequeña columna con capitel de la que salen también otros cuatro caños, ocupa este lugar desde el año 1835. Es un objeto histórico de gran relevancia, era una pila bautismal que estaba en el interior de la basílica y en ella recibieron el sagrado sacramento del bautismo dos indios que acompañaron a Cristóbal Colón de su segundo viaje a las indias, según reza este texto extraído de la web del Real Monasterio de Guadalupe:

 

“El almirante Cristóbal Colón estuvo muy ligado a los Reyes Católicos y por ello, tuvo presencia en Guadalupe en cuatro ocasiones con motivo de su empresa de la conquista de América: El 21 de abril de 1486; los días 5 y 6 de abril de 1486; en 1493 tras su logro del primer viaje, y en 1496 tras su segundo viaje trayendo consigo dos indios, Cristóbal y Pedro, que fueron bautizados en la pila que hoy se encuentra en la fuente de la plaza de Santa María.”

En el libro de bautismos del monasterio se recoge tal hecho:

“Viernes XXIX deste mismo mes se baptizaron Xristoval e Pedro, criados del sennor almirante don Xristoval Colón. Fueron sus padrinos: de Xristoval, Antonio de Torres e Andrés Blasques. De Pedro fueron padrinos el sennor Coronel e sennor comendador Varela, e baptizolos Lorenço Fernández, capellán”. 

Libro I de bautismos 29 Julio de 1496.

En el interior de la basílica podemos ver un gran cuadro de pintor Juan Manuel Núñez Báñez que lo ilustra, y en el exterior, al lado de la escalinata de acceso al atrio del monasterio, también existe un relieve escultórico donde se representa este singular suceso.

  

LAS PIEDRAS SAGRADAS

En ambos lados de la escalera de entrada a la majestuosa basílica de Guadalupe (Cáceres), se encuentran unas pequeñas rejas que suelen pasar desapercibidas por la poca luz que hay en la estancia, tras ellas hay unas piedras que se pueden tocar, yo mismo lo hice, estas piedras sagradas son fragmentos de la roca donde la Virgen posó sus pies.