sábado, 28 de octubre de 2017

DON BENITO. Los muertos. Capítulo 2

En uno de los versos de su poema  “A un poeta muerto” el escritor Luis Cernuda  dice: “Para el poeta la muerte es la victoria”, está dedicado a  Federico García Lorca, y sí, ciertamente sus versos hacen de él un ser inmortal.


Esta desangelada lápida indica el lugar donde, a diferencia del anterior, reposan los restos mortales de un, casi desconocido, poeta dombenitense en el camposanto de la ciudad, su nombre:

JUAN BAUTISTA CAMARA ORTIZ


A la gran mayoría de nosotros nos suena por tener  una placa con su nombre en una travesía del  final de la calle Ancha, parece ser su mayor victoria tras su muerte, nunca en la escuela nos enseñaron alguno de sus bellos poemas, uno de ellos dice así:

A ELLA

¡Cuánto placer me causa tu mirada

y el contemplar tu gracia seductora!

¡Es tan bella tu faz, niña adorada,

y tu alma tantos dones atesora!

Mírote con afán; busco tus ojos

bellos, como la luz del mediodía;

pero me fingen ¡ay! tales enojos

que llenan de tristeza el alma mía.

¿Por qué? Si en el revuelto torbellino

de este mundo, que impávidos cruzamos,

el norte buscas de tu fiel destino,

oirás mi voz, que gritará: ¡te amo!...

Don Benito, Julio de 1876.

En el año 1849 Charles Dickens presenta su novela “David Copperfield” y en nuestras ciudad, Don Benito, ese mismo año viene al mundo Juan Bautista Cámara Ortiz, el sábado 2 de junio en su domicilio familiar de la C/ Mesones. Su padre se llamaba Vicente Cámara Soriano, era un rico comerciante procedente de Aldeanueva de Cameros (Logroño), su madre se llamaba María del Carmen Ortiz Martín, nacida en Quintana de la Serena (Badajoz).

Charles Dickens

Desde muy temprana edad manifestó una gran sensibilidad para la literatura, hoy le llamaríamos un superdotado y siempre que las tareas del negocio familiar se lo permitían, no paraba de escribir poesías, uno de sus primeros trabajos reconocidos fue unas cuartetas que escribió con el fin de recaudar fondos con motivo de unas inundaciones acontecidas en Murcia.

Inundaciones en Murcia.

Cuando apenas había cumplido los 15 años ya se publican obras suyas, rubricando su nombre junto a poetas como José Sanmartín Aguirre y a partir del año 1875 es tal su prestigio que sus poesías aparecen con asiduidad en la publicación “La Moda Elegante” que se editaba por aquellos tiempos en Madrid.


En la publicación del año 1871 “El Blas” (un periódico satírico) aparece esta reseña sobre él que dice: “Para distraerme las penas, tengo el consuelo de que el subscritor Juan Bautista Cámara, de Don Benito, sólo ha recibido un número”.




Es tal el ritmo de sus trabajos en literatura que a partir del año 1874 no hay revista cultural extremeña que no cuente al menos con alguno de sus poemas y cuatro años más tarde publica en periódicos y revistas de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Cádiz.

Es nombrado miembro de las Sociedades Económicas de Madrid y Béjar, y de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles.

Murió el 10 de abril de 1894 en Don Benito, cuando estaba preparando un libro con sus poemas que nunca se editó.

Este es otro de sus poemas, se titula:

“A LA PRIMAVERA”

Traje viste de gala, y es hermosa.

Nardos tiene, y claveles, y azucenas.

Y sus aromas vierte a manos llenas

desde carroza de oro esplendorosa.

De corona le sirva a esta diosa.

Dulces mañanas tibias y serenas,

y el eco de la voz de las sirenas

que surge de la linfa rumorosa.

Alegran su vivir los mil primores

que brotan del arroyo y de la fuente;

su luz le presta la azulada esfera,

y en medio de armonías y de flores,

 su existencia desliza blandamente
la reina del amor: ¡la primavera!

Fuentes:

- GUTIERRES ORTIZ, J.A. (1999): “Juan Bautista Cámara". Biografías
   Dombenitenses (entre los siglos XIX-XX).

- DANIEL CORTES GONZALEZ:  Revista de Feria y Fiestas Don Benito 2016

- PANIAGUA PAREJO, G. (2010): “Crónica de Juan Bautista Cámara, poeta dombenitense” en
  Semanario Vegas Altas y La Serena.

Nota: Daniel Cortés, espero que pronto vea la luz ese libro que estas preparando, una recopilación de poemas y artículos de Juan Bautista Cámara Ortiz. 
 

viernes, 27 de octubre de 2017

LA GRIPE DE LA REINA




Por esta época llega fiel a su cita de todos los años nuestra amiga: LA GRIPE, afortunadamente esta enfermedad infecciosa actualmente causa pocas muertes, pero en el año 1580 concretamente el 26 de octubre (tal día como hoy) se llevó por delante a la reina de España, Ana de Austria y a punto estuvo de llevarse al mismísimo rey.


Ana de Austria fue la cuarta esposa del rey Felipe II, hija de Maximiliano II y de María de España, y por tanto su sobrina, murió por esta enfermedad en Badajoz cuando marchaba junto a su marido a Portugal pese a estar embarazada. En esta ciudad había una gran epidemia de gripe que causó una gran mortandad, el primero en contagiarse fue el rey y fue tal su estado que los médicos llegaron a temer por su vida e incluso tuvo que redactar testamento e instaurar un consejo de regencia con su esposa como regente. El rey se curó, pero pegó la gripe a su esposa, la pobre mujer después de sufrir las tradicionales sangrías y purgantes para combatir la fiebre, murió cuando contaba 31 años.


Fue enterrada con criatura que llevaba en su vientre en el monasterio de Santa Ana de Badajoz, posteriormente fue trasladada al Panteón de los Reyes de El Escorial pero en recuerdo a su estancia en la capital pacense, se dejaron allí sus vísceras. 


A esta epidemia se la ha denominado “El Gran Catharro” y es considerada como la primera  gran epidemia de gripe, el virus atravesó Asia y África, causando muchas víctimas en Italia, España y Alemania aunque el análisis conjunto de los datos contenidos en diferentes testimonios, suscita dudas respecto a que se tratara de una epidemia de gripe y apoyan la posibilidad de que se tratara de una de tos ferina (1) 

 
El peor brote de gripe fue durante la Primera Guerra Mundial, mató a más personas que el propio conflicto.

  
(1)    FUENTE: Revista Asclepio-Vol. LVII-2-2005. Autor principal: Ramón Camaño Puig

martes, 24 de octubre de 2017

DON BENITO. Fantasmas de dormitorio. 2ª Parte


Basado en hechos reales. Por dovane63.


 

Al día siguiente a la misma hora, el rostro volvió a aparecer, Adela no le dijo nada a su marido, muerta de miedo cogió a sus niñas y se fue a casa de su madre, no quería volver a casa.


Así un día y otro día, hasta que armada de valor una de esas mañanas se dirige al rostro y le dice:

- ¿Qué quieres, qué deseas de mí? Porque me tienes asustada, ¿sabes? ¿qué es lo que quieres?

El rostro se dirige a ella y le dice:

- No, solamente quiero que hagas una promesa incumplida.

- ¿Una promesa?

- Sí, una promesa a la Virgen de las Cruces, que vayas con mi hija, lleves un ramo de flores y le enciendas 3 velas, cuando lo hagas vendré de nuevo y te diré.


Fue a casa de su tía y le contó el caso, compraron el ramo, llevaron a la niña y encendieron las tres velas.

- A ver por qué no se le aparece a su mujer y a su hija, me decía.

Al otro día por la mañana, como era habitual, el rostro volvió a aparecer y le dijo:

-  Te lo agradezco y quiero que le digas a mi familia que bajo la séptima teja de la tercera fija del tejado de la casa, hay escondida una caja, que la cojan, hazme este favor  y cuando la tengan me iré en paz.



A lo que ella respondió:
-  Pues vete en paz y déjame en paz.

Y así se lo dijo a su tía.

-  Busca en el tejado bajo la séptima teja de la tercera fija (la casa y el tejado aún se conservan tal cual en el céntrico barrio de San Gregorio).

- Tita, que me ha dicho esto, hazlo por favor.

Efectivamente apareció una caja de lata muy vieja, muy vieja, que contenía muchas monedas y mucho dinero. A raíz de esto, no volvió a aparecer el rostro nunca más, pero a mi amiga le costó una gran depresión, ya no podía dormir, estaba aterrada y se despertaba todos los días a la misma hora mirando hacia la esquina del dormitorio. 

Afortunadamente logró superarlo y a día de hoy vive feliz junto a su marido y rodeada de sus hijos y nietos, mientas me contaba esta misteriosa historia, recordé una película de las llamadas de miedo (esas que mi madre no ve, “El espinazo del diablo”), desgraciadamente recientemente ha muerto su protagonista, uno de mis actores favoritos, el argentino Federico Luppi, recuerdo una escena memorable de la película que el actor dice:

- ¿Qué es un fantasma?

- Un evento terrible condenado a repetirse una y otra vez, un instante de dolor, quizá algo muerto que parece por momentos vivo aún, un sentimiento, suspendido en el tiempo, como una fotografía borrosa, como un insecto atrapado en ámbar. Un fantasma, eso soy yo.

FIN 


lunes, 23 de octubre de 2017

DON BENITO. FANTASMAS DE DORMITORIO




Basado en hechos reales. Por dovane63

La mayoría de las veces no busco las historias, estas vienen a mí por sí solas como si tuvieran vida propia y quisieran que se contaran, ese día, lo que me llevó a reunirme con Adela (llamaré así a la protagonista de este relato, pues quiere preservar su identidad) fue una causa bien distinta a la historia de hoy y aún no sé cómo terminó contándomela.


Hace ya unos años, Adela acababa de dar a luz en Madrid a una de sus hijas y poco tiempo después se trasladó a Don Benito, ciudad donde sigue residiendo.

Vivía por aquel tiempo feliz junto a Pedro, su marido, en una casa céntrica y grande. Una mañana tras levantarse su marido para ir a trabajar, sin saber por qué, fijó su mirada hacia una esquina del dormitorio y cuál no sería su sorpresa que vio un rostro, el rostro de un hombre.

- Me quedé petrificada, me comenta.

- Me miraba fijamente, pensé que serían alucinaciones o que quizás estaba soñando, pero no, cerraba los ojos y seguía ahí y me miraba, me miraba.

De un brinco saltó de la cama y se fue para la cocina, serían las 6:30 de la mañana, Pedro aún no se había marchado al trabajo y estaba preparándose un bocadillo.

- ¡Pedro, Pedro, que hay un rostro en la habitación, que hay un rostro en la habitación! ven a verlo, y sabes… me parece que es el tío Miguel.

- Oh, el tío Miguel… pero si el tío Miguel se ha muerto. ¡Anda! Que no tienes más que tonterías.

Pedro la acompañó a la habitación y no había nada, ni rastro.

- Ves, debe de haber sido un mal sueño, una pesadilla.

Al día siguiente a la misma hora, volvió a aparecer el rostro.

- Pedro, ¡míralo que está ahí, está ahí! ¿no lo ves?

Su marido no veía nada de nada por más que lo intentaba, cuando se levantó Pedro, Adela se fue a la habitación de las niñas y no volvió a entrar en el dormitorio, se sentía aterrada, esa misma mañana salió de casa y se dirigió a casa de D. Delfín, el cura, pues era y es una mujer muy creyente.


Le conto su caso muy nerviosa, a lo que el sacerdote la respondió:

- Bueno, bueno, hay gente que tiene un don para eso, no es el primer caso que conozco, tú háblale y pregúntale qué es lo que quiere.

No salía de su asombro, jamás se habría esperado esa respuesta.

- Buff…  ¿tú sabes lo que me entró por el cuerpo, Antonio? Pensaba que si le tenía que decir a Pedro que tenía que hablar con el rostro, me diría: ¡esta mujer está loca!

CONTINUARÁ