miércoles, 19 de diciembre de 2018

MERIDA. EL DESCENDEDERO



Plano de una porción del precioso puente antiguo romano de la ciudad de Mérida: con su Tajamar, como así mismo el de la muralla también antigua la que llega desde el puente hasta el Chorrillo, sobre la cual los Godos y los Moros han formado el castillo llamado vulgarmente el Conventual con sus vistas y perfiles / Mérida 3 de junio de 1794 Manuel de Villena Moziño.



Contrariamente a la opinión de algunos expertos, este formidable puente, uno de los más largos jamás realizado en España por los romanos pues tiene 792 m. de largo, solo superado por el puente sobre el Danubio, parece ser que fue construido de una sola vez y no en tres fases sucesivas. En primer plano de esta fotografía vemos el descendedero o rampa de descenso llamada de San Antonio, construida en el siglo XVII. 




En época romana este puente tenía dos tramos separados por un gran tajamar o aleta de encauzamiento que se extendía aguas arriba, servía este elemento para cortar el agua de la corriente y repartirla con igualdad por ambos lados, pero fue destruido por una riada, sus ruinas aún pueden verse diseminadas por las gravas de las islas del río, aguas arriba. La primera gran riada destructiva de la que se tiene noticia documental que sufrió este puente se produjo durante el reinado de Eurico, en el año 483. Posteriormente en el año 865 el emir Muhammad procedió a la destrucción de una parte del puente para someter a los asediados. La guerra de la Reconquista volvería a arruinar en buena medida el puente, existiendo la noticia de una restauración efectuada en 1272 bajo los auspicios del maestre Pelay Pérez Correa y a finales del medievo se encontraba en situación calamitosa, con arcos quebrados y tablones en algunas zonas, como indica un Privilegio conservado en el Archivo Municipal.




Hubo otra gran riada el día 11 de diciembre de 1603 que dejaría el gran tajamar en la más completa ruina, siendo sustituido por cinco nuevos arcos, construyéndose los dos descendederos actuales que vinieron a sustituir a los antiguos. Continuó siendo utilizado este puente hasta 1993, desde entonces hasta hoy, su uso es solo para peatones. 



Fuentes: 
  • Fichas del Patrimonio Arqueológico del Excmo. Ayuntamiento de Mérida. 
  • Biblioteca Virtual del Ministerio de Defensa.

viernes, 14 de diciembre de 2018

MEDELLIN TRAS LA BATALLA


28 de marzo de 1809. La matanza fue horrorosa, las pérdidas se elevaron a más de 10.000 hombres entre muertos, heridos y prisioneros, 170 eran jefes y oficiales. El Mariscal de Campo D. Francisco de Trías, resultó herido.

Entre los muertos:
Domingo Joaquín de Borja y Uriarte, nacido en Madrid en 1782. Único hijo de Doña Petronila de Uriarte y Borja, casada dos veces: Primero con su tío, hermano de su madre, D. Domingo de Borja y Lasteros, Segundo con D. Cristóbal de Torrijos y Uriarte, víctima de las convulsiones de nuestro país. Ingresó al Ejército como cadete de las Reales Guardias Españolas en 1794, sirvió en la Guerra de Portugal, desde 1801 y murió heroicamente, soltero, en la Batalla de Medellín de la Independencia Española, con el grado de Segundo Teniente del IV Regimiento de Guardias Españolas, el 28 de marzo de 1809.   

El coronel de Cádiz D. Juan de Villalva y Angulo.El capitán D. Antonio Abaurre, que herido por una bala de cañón al principio del combate, murió a las pocas horas en Don Benito. En esta batalla también perdieron la vida el Capitán D. FRANCISCO RIVESPINO y el Teniente D.  LUIS MAZUELA, ambos de Artillería.
Se distinguió por su heroísmo el Capitán de Artillería D. DIEGO DE ESTRADA amparando con su fuego a la Caballería Española logrando salvar todas la piezas y casi todos los carros de munición, con pérdida de gran número de hombres.
“Unos 4.000 heridos se habían reunido en Medellín y encerrados en una iglesia situada sobre una altura que dominaba la ciudad; les visité... y estos desgraciados me ofrecieron un aspecto deplorable; casi todos estaban heridos muy gravemente; no había nada para darles de comer, nosotros mismos carecíamos de víveres. Durante varios días permanecieron sin otros socorros que los que pudieron darles algunos de nuestros cirujanos más compasivos”.

 Girod de L'Ain.

FUENTES:
  • Nobiliario y blasón de Canarias: diccionario histórico, biográfico, genealógico y heráldico de la provincia (1878-1886) - Fernández de Bethencourt, Francisco, 1851-1916 
  • Observaciones sobre la historia de la guerra de España que escribieron los Sres. Clarke Southey, Londonderry, Napier. José CANGA ARGUELLES
  • EFEMÉRIDES ARTILLERAS, Capitán de Artillería D. Eduardo García-Menacho y Osset.

miércoles, 12 de diciembre de 2018

DON BENITO. "TORGE" ISUNZA

El diario de la noche La Nación de fecha 21 de Febrero de 1935 contaba en una de sus páginas:


“Esta mañana, a las once y media, tuvo lugar en la glorieta de Quevedo, y en la casa en la que durante muchos años estuvo instalado el taller-estudio del insigne escultor don Mateo Inurria de grata memoria, el acto del descubrimiento de una lápida conmemorativa que dedica a su memoria el pueblo de Madrid. Como es sabido, hoy se cumplía el onceno aniversario del fallecimiento del llorado artista. La lápida, muy decorativa, es obra del discípulo predilecto de Inurria, don Pedro Torre Isunza”.


Glorieta de Quevedo en Madrid


Relieve en piedra caliza realizado por Pedro de Torre Isunza, en homenaje del Ayuntamiento de Madrid al gran escultor cordobés.




 Detalle de la firma en la placa, el restaurador remarcó la firma y rebautizó a nuestro paisano como "Torge Isvnza"


MATEO INURRIA LAINOSA 
Nace el 25 de marzo de 1867 en Córdoba, ciudad en la que se educa y desarrolla gran parte de su actividad como escultor, profesor, restaurador y decorador.



Hijo de Mateo Inurria Uriarte, hasta 1883 asiste a los cursos de la Escuela Provincial de Bellas Artes, donde también recibieron formación artística notables creadores durante el último cuarto del siglo XIX: Lorenzo Coullaut Valera, Rafael García Guijo, Rafael Romero de Torres y Julio Romero de Torres. Entre 1883 y 1885 cursa estudios en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado de Madrid, Debido a sus progresos en el aprendizaje académico, la Diputación Provincial de Córdoba le concede una pensión para continuar sus estudios en Madrid hasta 1890, año en que Inurria presenta en la Exposición Nacional de Bellas Artes su obra Un náufrago, de tal verismo que la mala fe de algunos miembros del jurado lo tachan de vaciado del natural. Casado con María Serrano Crespo, no tuvo hijos. Murió el 21 de febrero de 1924, a los 58 años de edad.

PEDRO TORRE ISUNZA





Don Pedro Torre Isunza, nace en Don Benito en el año de 1892. Comienza su formación en Madrid en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, pero pronto se vincula al taller del escultor Mateo Inurria, quien influye profundamente en su estilo. Pasa un año en Roma y también viaja a París, donde trabaja con Lorenzo Coullaut Valera, escultor sevillano de modos realistas.


Lorenzo Coullaut Valera

 De vuelta a España, a partir de 1916 dirige el taller de vaciados del Museo de Reproducciones de Madrid. Participa en los Salones de Otoño y en numerosas ediciones de las Exposiciones Nacionales, consiguiendo en 1922 segunda medalla por Salomé y en 1930 por La Piedad (Prado).



 
También gana primera medalla en la Exposición Nacional de Barcelona de 1942. Su estilo, de carácter equilibrado y sereno, muestra en ocasiones una vena realista más acentuada, pero en la mayor parte de su producción se pueden encontrar concomitancias con el corte clasicista de José Clará.


Su obra, caracterizada por suaves y estilizados desnudos femeninos, muestra su gusto por la sensualidad y cierta idealización que se matiza en los retratos, en los que transmite una gran capacidad para la captación del carácter del personaje.



 Muere en Madrid en 1982.




 Algunas de las obras de Torre Isunza que adornan la ciudad de Don Benito

La Virgen de las Cruces, la obra de Torre Isunza más querida por los dombeniteneses

Fuentes:

  • Cordobapedia.
  • LA NACION (MADRID) 21-2-1935.
  • Museo del Prado.

miércoles, 5 de diciembre de 2018

DON BENITO. TESOROS PERDIDOS



“En la iglesia parroquial de Santiago han sido totalmente destruidos: el Retablo mayor de traza clásica, tallado y dorado, de tres cuerpos, con esculturas diversas de Santos en madera, policromadas, y varios lienzos que estaban en mal estado, originales, por lo menos algunos, de José de Mera, renombrado pintor extremeño del siglo XVII; la magnífica estatua de talla policromada de San Francisco Javier, tamaño menor del natural, que representaba al famoso misionero de pie, con la mano derecha sosteniendo un crucifijo y a la izquierda sobre el pecho, de cabeza verdaderamente admirable, de desconocido autor, pero obra sin duda de lo mejor de la escultura española del siglo XVII; y, por último, el grupo del Calvario, casi todo tallado (algunas figuras vestida de tela) y que estaba dentro de una urna; las esculturitas eran pequeñas y lo componían las figuras del Señor y los ladrones, la Virgen, San Juan y la Magdalena, todo muy pintoresco e interesante. El restante material artístico de este templo y de los demás, de escaso valor en general, corrió la misma suerte” 




En la misma publicación también se comenta:

“En la vecina Villanueva de la Serena su iglesia parroquial ha sido totalmente destruida por el incendio del templo por los rojos, la imagen del Cristo de la Pobreza, excelente escultura de madera policromada representando a Jesús muerto, en tamaño natural y que se atribuida a Montañés. También una pintura de Luis de Morales, la Virgen y el Niño, que existía en este templo se creía en los primeros momentos quemada, juntamente con todo el material religioso que el mismo existía. Sin embargo, posteriormente me comunicó persona seria que permaneció en Villanueva hasta la liberación de la ciudad, que un individuo llamado Alfonso Barco se opuso a la destrucción de referida obra y que la retiró del templo; en efecto, se encontró y la he entregado al señor cura 
 párroco.” 



El pintor barroco José de Mera Rodríguez era natural de Villanueva de la Serena, nació un 14 de agosto de 1672. De 1720 a 1725 trabajó en Don Benito donde realizó algunos cuadros para el retablo mayor de la iglesia parroquial destruido en 1936 durante la Guerra Civil y perdido para siempre, una lástima. 



Fotos: 

- Columna que se encuentra en el coro de la iglesia de Santiago, donde todavía se pueden apreciar los restos del fuego que se alimentó con las obras de arte de la iglesia. (foto dovane63).
- Imagen de San Francisco Javier, antiguo patrón de Don Benito (foto Mélida).
- Cuadro de Luis de Morales, rescatado por Alfonso Barco. (foto dovane63). 
- Retablo de la Iglesia de Santiago destruido en la guerra (foto Trajano).


Fuente: COVARSÍ YUSTAS, A.: Extremadura artística. Destrucción del tesoro artístico nacional en la provincia de Badajoz. La huella marxista. Revista de Estudios Extremeños (1938).