miércoles, 16 de agosto de 2017

DON BENITO - CUENTAS PENDIENTES




Los hechos ocurrieron en Don Benito, no diré la calle ni el nombre real de la persona, para cuidar su intimidad.

María (la llamaré así), la protagonista de esta historia, es una chica joven que enviudo a los 2 años de casada, una terrible enfermedad segó la vida de su marido. Me llamó la atención que siempre utilizaba manga larga o muchas pulseras que tapan gran parte de su brazo. Un día me contó esta increíble historia que daba explicación a este aspecto.

Este incidente comenzó hace unos años antes, desde un primer momento ya daba la sensación de que algo oscuro se ocultaba detrás… Empezó una fría noche de Noviembre a eso de las 3 de la madrugada. Esa noche, como muchas veces suele sucedernos, María despertó sin saber por qué y gracias a la poca luz que entraba por la ventana pudo observar que algo oscuro, como una sombra, se ocultaba detrás de la cortina, la sombra al percatarse de que había sido descubierta salió huyendo dirección al pasillo perdiéndose en la pared del vecino. Era algo extraño pues eran como dos piernas largas sin apenas cuerpo, pero María se volvió a dormir pensando que habría sido un mal sueño, sin darle más importancia.


El segundo encuentro fue más aterrador. El de 2014 como sucediera la vez anterior, fue también sobre las 3 de la mañana, en esa ocasión al abrir los ojos pudo contemplar a los pies de su cama una figura delgada, más delgada de lo normal, alta y negra, se encontraba inmóvil mirándola fijamente con dos ojos rojos como dos brasas salidas del mismísimo infierno. María estaba paralizada por el miedo, sin poder moverse, ni gritar, ni poder hacer nada, mientras ese ser se arrastraba hacia ella lentamente y agarrándola fuertemente por el brazo le dijo con una voz aterradora de ultratumba:

- “Por tu culpa me estoy quemando en el infierno”… 

Dice que no sabe cómo lo hizo, pero consiguió dar un salto y encender la luz, en ese momento el espectro desapareció al instante.


Expertos creen que estos ataques nocturnos no son más que la parálisis del sueño o sueños lúcidos y suelen aparecer cuando uno menos se lo espera, tendiendo a repetirse. Que nada tienen que ver con la realidad y que esa sombra es evidencia de una anomalía neurológica en la región del cerebro que gobierna la vista…

Otros dicen que son criaturas demoníacas enviadas por Satanás para atormentar y aterrorizar a los humanos pero que pidiendo a Jesús se les ahuyenta… también se cuenta que si realmente existen estos seres, su origen puede ser un universo cercano o dimensión paralela.


Año 2017, María sigue teniendo en su brazo una marca, la marca de una mano, una mano como grabada a fuego. Yo he visto esa marca y los pelos se me ponen de punta cada vez que recuerdo la frase…

 “Por tu culpa me estoy quemando en el infierno”.

2 comentarios:

  1. Por Dios ,dime que es mentira,madre mía....quien va a dormir esta noche?....

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  2. Joood... parece una historia de fuego de campamento! Sin embargo, yo tuve una también, menos siniestra aunque inquietante. Ya te la contaré.

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